Vida y Camino hacia un futuro
Historia de la Familia Tocol Aguila, conocidos como tocolitos. Esperamos relatar todas las penas y alegrias de esta familia Chilena.
jueves, 20 de octubre de 2005
martes, 18 de octubre de 2005
miércoles, 12 de octubre de 2005
lunes, 10 de octubre de 2005
viernes, 7 de octubre de 2005
Su Hijo Sordo Tambien Puede: "Y, ¿Por Que No?
Su Hijo Sordo También Puede: "Y, ¿Por Qué No?
El criar un niño con lleva varias experiencias para un padre y una madre a través de los años: éxitos, desencantos, sorpresas, más éxitos. Pero, las luchas, los esfuerzos y los sacrificios son todos para la misma meta universal: el criar un niño a ser un adulto independiente y capaz de ejercer una vida feliz. Máximamente, en este país de tantas oportunidades para quienes las buscan, ¿por qué no? Aunque sea difícil imaginarlo, para los hijos sordos, aún se puede decir:
"Y, ¿por qué no?"
Su hijo sordo puede hacer cualquier cosa de la misma manera como lo hacen los niños de su edad con audición normal.
Su única discapacidad y por lo tanto su única diferencia es la "sordera".
Para ellos al igual que para todas las niñas y los niños del mundo, es muy importante lo que piensen los padres de ellos, lo que esperen de ellos, y sobre todo contar con el apoyo que reciban de los padres. Con ello cuentan para poder enfrentarse al mundo, para poder crecer y desarrollarse plenamente.
Sabemos que no es fácil la crianza de hijos con pérdidas auditivas o sordera. Cada día es un reto. A veces muchos padres por querer proteger a sus niños sordos los cuidan demasiado (los sobreprotegen) y tratan de alejarlos de otras cosas.
Explíqueles a sus familiares y vecinos que su hijo (a) solo tiene una pérdida auditiva. Pero que él o ella también puede tener una vida normal, siempre y cuando los demás no le cierren el paso.
Comente con sus vecinos y familiares sobre los avances y logros de los tratamientos. Y por supuesto, sobre los adelantos o acontecimientos de su hijo, y de cómo usted ha aprendido también en este proceso acerca de lo importante que es la comunicación y la participación de los padres en el desarrollo de los hijos.
Es normal sentir que ellos son más frágiles e indefensos. Pero, esta sensación no les ayuda mucho en su crecimiento y va en sentido contrario de lo que todo padre o madre quiere sembrar en sus hijos:
1.- El que puedan valerse por ellos mismos
2.- El poder enfrentarse al mundo con sus propias herramientas.
3.- El poder salir adelante y formar un hogar
Es cierto que sin la ayuda de los padres o quienes los cuidan, los hijos se verán en muchos aprietos para poder salir adelante. Pero también es cierto, que lo logran no sólo por la sola presencia de los padres, sino gracias a las enseñanzas que recibieron de ellos. Bien dice el dicho "no le des pescado, enséñale a pescar".
Hay varias maneras por las cuales usted puede enseñarle a su hijo y demostrarle que le tiene confianza:
- No lo ponga tímido, déle alas y aliéntelo a que salga, comience con algo pequeño. La seguridad y confianza no se adquiere de un día para otro. Se construye con las acciones de cada día.
- Pídale claramente una sola cosa y déle un mandado o tarea a la vez, no varias.
- Siéntese con él y explíquele las tareas escolares; busquen juntos la información, pero no le haga la tarea .
- En lugar de regaños o sustos por cruzar la calle como no debe, muéstrele como hacerlo por la vía del peatón.
- Recuérdele que sus ojos son sus oídos; de tal modo que, enséñele a estar alerto a las señales y letreros.
- En la casa, encárguele tareas y responsabilidades de la misma manera que a sus hermanos, por ejemplo, recoger la mesa, lavar los platos, sacar la basura, limpiar su cuarto, etc.
- No se preocupe por el mañana (¿qué será de él o ella?); trabaje en el aquí y el ahora. Cada día tiene sus propios retos.
- Tenga paciencia.
- Consulte con especialistas sobre que más puede hacer. Pregunte y salga de dudas sin temor a que lo vean como ignorante. No hay preguntas tontas. Las preguntas ingenuas son las que más hacen reflexionar a los expertos.
- Recuerde siempre que hay que darle una sola instrucción, lo más claro y sencillo que se pueda. Asegúrese que entendió y si no vuelva a explicarle.
- Sea optimista. Es más fácil ver "el vaso medio lleno, que medio vacío". No le de mensajes negativos a su hijo, lo podría perturbar. Sea positivo.
- Demuéstrele que usted confía en él o ella, en que SÍ PUEDE hacer las cosas.
- Piense en que su hijo(a) tiene las mismas necesidades que tienen los otros niños y niñas: necesita jugar, expresarse, divertirse, aprender, y ser feliz.